EL JARDÍN INFANTIL QUE SE CAPACITÓ PARA CUIDAR A SU ALUMNO CON DM1
Publicado el 25 de agosto de 2023
Gabriel Alvarado fue diagnosticado con Diabetes Tipo 1 el 10 de mayo del 2023. Tras el debut, su madre optó por sacarlo del jardín para cuidarlo en CASA, pero se encontró con una EJEMPLAR sorpresa. A continuación, en esta doble entrevista, Paola Figueroa, directora del jardín Nueva Cumbre, y María Fernanda Altamirano, madre de Gabriel, relatan cómo vivieron este proceso que es un ejemplo a seguir para otras entidades educativas.
«Desde el debut de Gabriel, todo ha sido una montaña rusa de emociones”, explica al comienzo de la entrevista María Fernanda, madre de Gabriel, niño de dos años. Ella es enfermera, tiene 30 años, y enfatiza en la idea de que los establecimientos educativos siempre han puesto trabas cuando se trata de intervenir en la salud de los estudiantes con alguna condición.
El Jardín Infantil Nueva Cumbre, ubicado en la ciudad de Puerto Montt, es una institución pública sin fines de lucro, perteneciente a la Fundación Integra. Desde que supieron del debut de Gabriel, tomaron un rol activo y abierto en el cuidado del pequeño. Todo el equipo se capacitó: la directora Paola Figueroa, las asistentes de párvulos, las educadoras, las nutricionistas y las manipuladoras de alimentos.
¿Cómo comenzó toda esta historia?
Paola Figueroa, directora del Jardín Nueva Cumbre: “A Gabriel lo conocemos desde pequeño, y en medio de su desarrollo nos dimos cuenta de su baja de peso y excesiva sed. Gabriel es un niño muy participativo, pero andaba cansado y tomaba mucha agua. Todo el tiempo se escapaba al baño a tomar agua. Además, estaba retraído. En nuestro establecimiento hacemos seguimiento a la salud de los niños, y le dijimos a la mamá que lo llevara al médico. La mamá le hizo los chequeos y le diagnosticaron Diabetes Tipo 1”.
María Fernanda Altamirano, mamá de Gabriel: «Cuando a Gabriel lo diagnosticaron, yo fui con un nudo en la garganta a despedirme de la tía del Jardín, porque otras mamás en la misma situación los habían sacado porque a esa edad nadie los recibe, con lo inestables que son sus glicemias. Fui con esa intención y me encontré con la sorpresa de que no iba a ser así. Lo conversaron y lo aceptaron. Nunca nos pusieron límites”.
¿Qué pasó después?
Paola Figueroa, directora del Jardín Nueva Cumbre: “Yo le dije que se tranquilizara, que en el Jardín nos capacitaríamos y estudiaríamos, pero que no lo saquen. Ella estaba agradecida, así que comenzamos a trabajar juntas. Yo le informé a la nutricionista regional de Fundación Integra, y la invitamos para que estuviera en las capacitaciones que dio María Fernanda, que es enfermera y se maneja bien con todos los procedimientos. Ella nos preparó sobre los temas de nutrición, alimentación, pinchazos, glicemia y todo”.
María Fernanda Altamirano, mamá de Gabriel:
“Ahí realicé dos capacitaciones. La primera en lo teórico y la segunda en lo práctico. Las tías lo pincharon, él tomó desayuno en el jardín y desde los primeros días vimos que anduvo muy bien. Estoy agradecida por esta instancia, porque se marca un precedente para otras instituciones educativas: si un jardín sin fines de lucro pudo hacer esto con nosotros, cualquier institución educativa puede”.
¿Cuál es la situación actualmente?
Paola Figueroa, directora del Jardín Nueva Cumbre: “Gabriel ha ido y no se ha visto afectado. Al momento de pinchar, él ya sabe todo. Para ser tan pequeño, no le da miedo nada. Nosotros le explicamos todo paso a paso, y él se levanta solo la polera y accede sin dificultad. Quisimos compartir esta historia, porque supimos de algunos colegios en que las profesionales no se atreven a realizar este tipo de procedimientos”.
María Fernanda Altamirano, mamá de Gabriel: “Gabriel está yendo al Jardín y está bien, volvió a ser el mismo de antes, participativo. Yo lo iba a sacar y se iba a perder una etapa clave de socialización. Me gustaría que las demás instituciones sepan que sí se puede, y que no hagan que los papás dejen de trabajar. Es claro que faltan herramientas para tratar la diabetes tipo 1 en la salud pública, y los jardines o colegios pueden ser un apoyo”.
María Fernanda, ¿Cómo ha sido tu experiencia con la FDJ?
Prácticamente, nuestro equipo de salud es la FDJ. Ha sido el núcleo más importante del tratamiento. Si a mí no me hubieran hablado de la Fundación, hoy estaría con una depresión terrible. El psicólogo Javier nos ha ayudado montones. La nutricionista Javi también, ya que nos simplificó la vida en cuanto a la alimentación. Hay que ocupar las redes de apoyo y el material que tenemos a disposición. La tecnología hoy nos ayuda mucho.
Recurrir a ustedes en primera instancia fue la mejor idea que pudimos tener como familia. Nos entregaron material maravilloso y las intervenciones de los profesionales fueron idóneas para que Gabriel se adhiriera al tratamiento. Mi mensaje para las familias que debutan es que se acerquen y confíen en los tratamientos que brindan, porque es una ayuda gratuita y de excelencia.
