Consideraciones antes de viajar de vacaciones
Publicado el 15 de diciembre de 2017
Se acercan las vacaciones de verano y con ello, muchos jóvenes comienzan a pensar en los próximos destinos turísticos a visitar junto a su familia o amigos. Viajar significa hacer un cambio en la cotidianidad, y es por ello que tanto el régimen de ejercicio como el de las comidas podría verse afectado, aún más si consideramos cambios en las zonas horarias y el tan incómodo jet lag. A continuación daremos una serie de recomendaciones elaboradas por la National Diabetes Services Schem.
Seguro de viaje
El seguro de viaje es recomendable para todos, pero especialmente para quienes tienen diabetes tipo 1, y es importante que en los términos y condiciones se incluya la cobertura a condiciones preexistentes, los lugares que se visitará y las actividades a realizar (por ejemplo, bungy o ski) y si se cobra una tarifa adicional por la pérdida de suministros de insulina.
Vacunas y medicamentos
Antes de hacer un viaje internacional, es bueno consultar la información del país de destino acerca de reglas y regulaciones, así como también la seguridad del lugar. Otra de las cosas que se deben hacer anticipadamente son las vacunas de viaje y medicamentos que se deben tener. Hable con su médico para determinar qué vacunas específicas o medicamentos especiales (por ejemplo, contra la malaria) va a necesitar. Esto varía de país en país, y lo mejor es darse un tiempo de 3 meses antes de la fecha de viaje, ya que puede requerir de una serie de inyecciones.
Carta que demuestre DM1
Otro de los imprescindibles es pedirle al médico una carta que demuestre que tiene una condición médica de diabetes tipo 1. La carta debe indicar: nombre completo, dirección, fecha de nacimiento y que tiene diabetes tipo 1. También debe enumerar los medicamentos y dispositivos de administración de insulina que use, equipo de medición de glucosa en sangre, y decir que es necesario que lleve estos artículos en todo momento. Por último, debe indicar la necesidad de llevar objetos cortantes como agujas y lancetas a bordo del avión. Se recomienda hacer varias copias.
Imprima una lista de los hospitales del lugar de destino o póngase en contacto con la embajada para averiguar sobre el sistema de salud en el país. Lleve una lista de todos sus contactos de emergencia, incluyendo médico, educador en diabetes y miembros de la familia. Lleve una copia de todos sus documentos en sus dispositivos inteligentes y también deje una copia en casa.
Antes del vuelo
Todos los medicamentos recetados deben ser llevados por la persona a la que están recetados. Lleve todos sus suministros para la diabetes en su equipaje de mano, recuerde que el equipaje almacenado en las bodegas de carga puede estar sujeto a cambios de temperatura que pueden inactivar su insulina. Notifique a los inspectores de seguridad que tiene diabetes.
Durante el vuelo
Mantenga sus suministros de insulina y refrigerios para tratar las hipoglicemias cerca de usted y no en el compartimento superior durante el vuelo, esto asegurará tenerlos a mano en caso de emergencia. Controle sus niveles de glucosa en sangre con frecuencia.
Luego de aterrizar
Ajuste su el reloj de la bomba (si es que la usa) al momento de aterrizar en su destino. Esto también puede requerir el cálculo de cuándo es su próxima comida o inyección. Recuerde que cambios en las actividades, comidas y rutinas pueden requerir ajustes a su dosis de insulina o ajustes de la bomba.
Recuerde mantener la insulina y dispositivos de administración comprobando que todo esté bien. Luego de pasar por los controles de seguridad, es buena idea dividir sus suministros para la diabetes en diferentes bolsos e incluso en los bolsos de quienes lo acompañan. Si pierde su equipaje o suministro, lo mejor es asistir a un hospital. En caso de que sea ingresado al hospital por casos de emergencia, debe comunicarse con sus contactos de emergencia y con la aseguradora de viajes.
La clave del viaje es una buena planificación.
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